Proyecto de cafetería
Reforma cafetería El Cub (de arriba)
El Masnou
El nombre de la cafetería refleja exactamente lo que era este local: un cubo. El gran reto para la arquitecta era transformar con éxito la forma anodina de un cubo sin personalidad, una caja de vidrio de cuatro caras, en una cafetería acogedora.
Se parte de un local vacío y se crea un núcleo de servicio. Siempre se debe tener presente que tiene que ser una cafetería totalmente funcional que, por una parte se tiene que dotar de personalidad y, por otra parte, tanto el servicio como los clientes se sientan cómodos. A partir de este núcleo, se diseña a medida el mobiliario, la barra y las estanterías optimizando el espacio. Todo tiene que recordar al estilo shabby chic que tanto gusta a los propietarios. Se estudian los colores, los materiales, las formas y los complementos: se eligen maderas y materiales claros, se cuidan mucho los detalles, especialmente la iluminación. Las lámparas románticas de colores suaves y motivos florales, con pequeños detalles verde mint, rosa empolvado y azules suaves, están presentes con la sutileza característica de este estilo. Todos estos elementos destacan buscando el equilibrio con la funcionalidad de un espacio pequeño que no puede olvidar que quiere ser una cafetería.
El Cub ha perdido su fría connotación geométrica y ha conseguido acomodar un espacio cálido y acogedor que transmite la sensación alegre y luminosa de un día feliz que inspira el estilo shabby chic.